¡Basta de firmas a nuestras espaldas! ¡Basta de retrocesos!
El 20 de octubre los dirigentes de CCOO y UGT desconvocaban la huelga del metal en Tarragona tras firmar un acuerdo de miseria que supondrá una nueva pérdida de poder adquisitivo durante los próximos 4 años, junto a otros importantes retrocesos.
Y lo hacían sin organizar siquiera una asamblea de trabajadores, sin consultarnos o recabar la opinión de las plantillas. Un comportamiento más propio de un jefe de personal, que de un representante sindical al servicio de sus compañeros.
Pero además, tras la firma del acuerdo, nos mienten sin pudor alguno señalando que el acuerdo “garantiza el poder adquisitivo”. ¡Nada más lejos de la realidad! Ellos mismos explican que han firmado una subida del 6,4% para 2022 y del 3,4% para 2023. ¿Cómo puede decirse que se nos garantiza el poder adquisitivo en 2023 con una subida del 3,4%, cuando la inflación va camino de superar los 10 puntos a final de año? ¡Son entre 5 y 7 puntos de pérdida salarial! Y eso si las cosas no empeoran.
Es cierto que para 2022 se ha logrado una subida cercana al IPC de 2021 (que fue del 6,5), pero ni siquiera eso compensará la inflación que venimos padeciendo mes a mes en 2022. Y además firman un acuerdo a 4 años, aceptando el 2,8% para 2023 y 2,4% en 2024 cuando organismos económicos internacionales como el FMI plantean altas tasas de inflación hasta 2026. La patronal debe estar dando saltos de alegría.
Eso sí, han introducido una cláusula técnica de revisión salarial que supondría recuperar el 85% del poder adquisitivo ¡¡en 2026!!, cuando finalice el convenio. Esta cláusula, que la patronal está utilizando en muchos otros convenios para garantizar que los sindicatos firmen, es puro papel mojado. Nada impide que cuando llegue el momento la patronal la incumpla. Pero además, el 85% ni siquiera es el 100%. Ese 15% serán cientos o miles de euros perdidos, según evolucione la inflación. Y obviamente no tendrá carácter retroactivo, perdiéndose miles de euros de salario en 2023, 2024 y 2025. Y lo mismo podemos decir respecto a la eliminación de la compensación y absorción, que ya estaba en el anterior convenio, pero que los empresarios incumplen mediante todo tipo de trucos sin que CCOO y UGT actúen para impedirlo.
Nos encontramos ante un mal acuerdo que nos empobrecerá, que se firma sin ni siquiera luchar y a espaldas de la mayoría de las y los trabajadores. En un año de negociación, UGT y CCOO no han convocado asambleas de trabajadores y trabajadoras para debatir qué reivindicaciones presentar y qué plan de lucha seguir. Así, sin la participación de las y los trabajadores, sin asambleas, sin movilización, sin huelgas, desde la comodidad de los despachos y las moquetas, solo pueden conseguirse estos penosos acuerdos.
Por eso mismo, necesitamos levantar una alternativa sindical combativa, democrática, de clase, que rebase a estos negociadores sindicales que en el día a día no nos representan. Esta alternativa la estamos levantando los sindicatos combativos, como FTC-IAC, los únicos que hemos convocado activamente, con panfletos y carteles, esta huelga que ahora han desconvocado. Una alternativa que levantamos dirigiéndonos fraternalmente, en unidad de acción, a las y los delegados y afiliados de CCOO y UGT, que tampoco se sienten representados muchas veces por los altos dirigentes de su sindicato que se sientan en la mesa de negociación.
Han firmado el convenio, pero muchos rechazamos esta firma a nuestras espaldas y sabemos que, tal y como están las cosas, habrá nuevas batallas. Y probablemente más pronto que tarde. Debemos prepararnos para esas peleas levantando la bandera de la lucha en las calles y organizando un sindicalismo de combate.
¡Únete a nosotros! ¡Luchemos por un sindicalismo democrático y combativo!
- Subida salarial acorde al IPC real acumulado, que ya ronda el 10% y podría seguir subiendo.
- Eliminación real de la compensación y absorción.
- Reducción de la jornada anual. Semana de 35 horas con mantenimiento de salarios.
- Reducción del periodo de prueba a la mitad.
- 100% de salario en caso de enfermedad o incapacidad, ya sea común o laboral.
- Jubilación a los 62 años con el 100% de la pensión.