El pasado mes de diciembre le fue comunicada al Presidente del Comité Intercentros la apertura de un expediente disciplinario que ha finalizado con su despido.
La razón oficial es no haber devuelto el coche de empresa a tiempo y una supuesta falsificación de un documento de hace 30 años, algo que el compañero ha negado rotundamente. La realidad es que este compañero, cuando la empresa trató de recortar hace unos meses algunos de sus derechos, decidió oponerse frontalmente denunciando dicha modificación de condiciones. Fruto de ello, entendemos que ha sufrido esta reacción por parte de la empresa.
El objetivo de estas presuntas prácticas por parte de DXC FDS sería doble. Por un lado, poder prescindir de los trabajadores con mejores condiciones laborales y salariales, como ocurre en este caso, de cara a ir sustituyéndolos por otros con condiciones más precarias y peores salarios. En segundo lugar, poder prescindir de un representante sindical, en este caso el Presidente del Comité Intercentros y secretario de la sección sindical de CCOO, que ha mantenido una posición reivindicativa frente a la empresa.
La realidad es que este compañero fue desplazado a un puesto de trabajo que suponía un claro perjuicio tanto desde el punto de vista profesional como desde el punto de vista de sus condiciones laborales. Además, este traslado se realizó sin dar cumplimiento a las condiciones de promoción y licitación reflejadas en convenio de empresa, demostrando que la decisión estaba diseñada específicamente para él.
Por otro lado, los argumentos de la empresa no nos encajan. En primer lugar porque el coche, que reclamaba la empresa y que fue objeto de disputa, fue devuelto 6 días más tarde a la fecha señalada por causas justificadas que conocía plenamente la empresa, como se ha demostrado mediante diversos mails y escritos. Por otra parte, la supuesta falsificación del documento resulta un argumento cuya veracidad se antoja mucho más que complicada, especialmente tratándose de un documento escrito con caracteres propios de una maquina eléctrica de los años 80.
Por todo ello, consideramos este despido arbitrario e injustificado. En este momento, además, se ha abierto un proceso de negociación entre la empresa y las y los representantes de las y los trabajadores. Llamamos a la empresa a reflexionar sobre si este es el mejor método de cara a continuar la negociación. El próximo día 5 de febrero se celebrará la conciliación, donde esperamos que la empresa rectifique, aceptando la nulidad de este despido.