En el mes de noviembre del 2019 un grupo de trabajadores del turno tarde de esta Fundación dimos “por finalizado el acuerdo establecido con la entidad sobre el artículo 42 del vigente XV Convenio Colectivo General". De acuerdo con dicha clausula, las y los trabajadores nos vemos obligados a trabajar en el espacio del comedor a cambio de un plato de comida.
Todos sabemos además que la firma de dicha clausula en el contrato es todo menos voluntaria.
Fruto de esta decisión legítima de las y los trabajadores, ya que la clausula se supone que es “voluntaria”, la empresa intenta ahora culparnos por reclamar nuestros derechos. Pero esta situación solo tiene un responsable, la dirección de la empresa, que pretende ahorrase parte de nuestros salarios obligándonos a trabajar una hora a cambio de comida. ¡No aceptamos más abusos!
Desgraciadamente, los representantes del llamado Grupo Independiente de Trabajadores de la Fundación (GITF), que debería defender los derechos de las y los trabajadores, también están en esta línea, habiendo defendido todos estos años la legalidad y validez de ese trabajo a cambio de comida, y culpándonos ahora por intentar acabar con este abuso propio de la Edad Media.
La empresa, apoyándose en estos tres delegados, quiere legitimar un acuerdo que empeore aún más nuestra conciliación de la vida laboral y familiar. También quieren que derechos adquiridos como la pausa del café ya no sea tiempo computable trabajado y que las libranzas estén centradas en horario de entre semana. El objetivo es castigar a todas y todos los trabajadores por haber reclamado nuestros derechos. ¡No podemos permitirlo!
Este conflicto es exclusivamente culpa de la empresa, que nos quiere trabajando a cambio de comida. Entendemos que muchos compañeros/as de trabajo tengan dudas o temor, pero no podíamos seguir así. Por eso os animamos a uniros a nuestra reclamación y a renunciar a trabajar a cambio de un plato de comida. Todos sabemos que nadie ha aceptado “voluntariamente” esa imposición.
Finalmente, nos dirigimos también a las y los familiares de los usuarios. Somos profesionales, y queremos la mejor situación para las y los usuarios. Para ello necesitamos condiciones laborales dignas, recursos, más empleados, etc… Mejores condiciones supondrán un mejor servicio. Por eso os pedimos que nos apoyéis. Trabajar a cambio de comida en pleno siglo XXI es indecente e inmoral.