Este 21 de mayo está convocada a nivel estatal una huelga en el primer ciclo de Educación Infantil en contra del nuevo convenio del sector firmado por UGT, FSIE y USO. Un convenio que no ha sido discutido y votado por las trabajadoras y trabajadores del sector, y que normaliza nuestras condiciones de total precariedad y nuestros salarios de miseria.  
Las educadoras y educadores infantiles nos encontramos en una situación pésima, no llegando nuestros salarios a los 900€ brutos por un trabajo que requiere gran responsabilidad y dedicación. Tras siete años de congelación salarial y dos de negociaciones con la patronal, la subida que se nos ofrece es de apenas 30€, de cara a alcanzar el nuevo SMI de 900 euros, aunque eso si tu contrato es de educador/a infantil. Si tu contrato es de auxiliar, ni siquiera eso, ¡ni siquiera el SMI!, teniendo la misma formación y prácticamente la misma responsabilidad. ¡Es una auténtica vergüenza que haya sindicatos que firmen algo así!

La educación infantil es el sector educativo más infravalorado, más privatizado y más abandonado, olvidando la gran responsabilidad y lo fundamental del cuidado y la educación en los tres primeros años de vida de una persona. Un buen ejemplo son las ratios imposibles que se nos imponen: ¡una educadora a cargo 8 bebés de menos de un año! En el caso de niños y niñas de entre 1 y 2 años, 14 por educadora, y cuando tienen entre 2 y 3 años, 20 por educadora. ¿Qué clase de educación es esta? ¿Qué atención podemos prestar con estas ratios? ¡Y todo por menos de 900€ euros al mes! Es un fraude tanto para las y los trabajadores como para las y los usuarios y familias.

El día 22 de mayo se firma un convenio que pretende perpetuar esta precariedad y continuar devaluando la educación infantil, consolidando un modelo meramente asistencial, donde más que centros educativos quieren aparcamientos para bebés, niñas y niños. ¡No lo podemos consentir! Por eso hoy, 21 de mayo, salimos a la huelga, por nuestras condiciones laborales y salariales, por unas condiciones dignas en el primer ciclo de Educación Infantil para niñas, niños y familias, y en defensa de un sistema público, gratuito y de calidad para este tramo educativo fundamental.

CCOO y CGT se han desmarcado de la firma de este convenio, algo muy positivo, y han convocado esta huelga, pero el día 21 tiene que ser el primer paso de una movilización contundente en la que todas las reivindicaciones y no solo la salarial tengan cabida. Una vez que se firme este penoso convenio la lucha debe continuar, mejor organizada y sostenida en el tiempo. ¡No podemos aceptar otros 4 años así!
 
Todo esto también demuestra la necesidad de defender un sindicalismo combativo y democrático. A pesar de desmarcarse ahora del convenio, CCOO, que tiene la mayoría en el sector, no ha ido a la mesa de negociación durante estos últimos 7 años apoyándose en la movilización de las y los trabajadores. Como decía Marcelino Camacho, ¡lo que no se consigue en la calle, no se arranca en la mesa de negociación!

Por eso es necesario dar un giro radical en la forma de hacer sindicalismo, contando con la participación cotidiana de las y los trabajadores, elaborando las propuestas para los nuevos convenios en consulta con las plantillas, y sobre todo, planteando planes de lucha serios de cara a arrancar a la patronal lo que queremos y por justicia nos corresponde.

¡Basta de precariedad y salarios de miseria!
¡Por una Educación infantil pública, gratuita y de calidad!
 

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